Leo (Peter Lanzani) es un estafador de poca monta que tiene un acuerdo con su vecina, Flavia (Eugenia Suárez), una joven prostituta. Leo se encarga de grabar a los clientes de Flavia y reparten los beneficios que obtienen extorsionando a éstos. Lo que comienza siendo un simple chantaje, termina siendo la grabación de un crimen cometido por Dugès (Gerard Depardieu) y sus inseparables Tobías López (Santiago Segura) y Harken (Hugo Silva), unos asesinos a sueldo que trabajan para uno de los laboratorios más importantes del mundo.
Leo consigue huir de la escena del crimen refugiándose en una comunidad judía haciéndose pasar por uno de ellos. Leo revolucionará a toda la comunidad: se enamorará de Sara (Arancha Martí) la hija del Rabino Mendi (Luis Brandoni) y comprometida con Yosi (Darío Lopilato), otro miembro de la comunidad quien no puede ni ver a Leo. Pero los asesinos se acercan y Leo, junto a su hermano cura, Agustín (Pablo Rago) y sus nuevos compañeros de aventura, tendrán que enfrentarlos para salvar sus vidas.